Es definitivamente emocionante y divertido cuando mis días transcurren llenos de mucha energía.
En lo personal, dedicarme a cosas que me causan alta satisfacción como innovar, crear, descubrir, aprender, comunicar, organizar y tantas otras de las divertidas y estimulantes ocupaciones que tengo la suerte y el placer de disfrutar, si bien me agotan, terminan dejándome cada vez más recargado y con más ganas de dormir poco y avanzar más.
Son en estos momentos cuando aprecio más la aventura de vivir, más allá de los milagros intensos asociados con la familia, los nuevos niños y la felicidad del entorno íntimo. Cuando estoy realizando cosas y dando pasos para avanzar en dirección a la realización de uno de mis planes, encuentro profundamente excitante este devenir de mis horas.
En días como hoy, sólo quiero dar gracias a la vida y confiar en seguir avanzando y consiguiendo siempre nuevos proyectos en todo lo que haga por rutinario que le pueda parecer a otro.
Sin duda, la felicidad no es sólo alcanzar un destino, es andar con pasión cada metro del camino.
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