miércoles, 20 de agosto de 2008

Lealtad y Compromiso

Dirigir un equipo humano para hacer funcionar una empresa es un tema complicado en cualquier lugar del planeta. En nuestra revolucionada Venezuela es en un extravagante reto.

Cuando los negocios van bien y una empresa logra agregar tanto valor a sus clientes que genera excedentes importantes, con seguridad se puede disponer de más recursos para maniobrar e invertir en la organización y en las 6 bases sobre las que se apoya un equipo emocionalmente involucrado o comprometido. En los tiempos de vacas gordas, a una empresa le es más fácil "venderse" como un vehículo para la realización individual y colectiva para la mayoría de sus miembros.

Cuando las cosas se complican o toca atravesar una crisis de cierta magnitud y duración y, en consecuencia, cuando generenciar nos encuentra con poco tiempo y recursos insuficientes para mantener la solidez de esas 6 patas, toca apelar a recursos emocionales intangibles para lograr una estrecha comunión de valores entre la organización y muchos de sus miembros.

Algo parecido pasa con el relacionamiento entre parejas. Una pareja que disfruta de un periodo económicamente exitoso tiende a notar menos o a molestarse y preocuparse menos por importantes carencias de su relación. El que una pareja enfrente y viva una importante crisis económica, suele sacar a flote esas carencias y magnificarlas y si no hay sólidos fundamentos y valores compartidos y compromiso, es muy frecuente terminar en una irreparable ruptura.

¿Y cuáles son esas 6 bases?
  1. El liderazgo
  2. El trabajo en sí (el sentirse retado, cómodo, dotado)
  3. La real posibilidad de crecer y de ser reconocido
  4. Equilibrio entre trabajo y vida personal
  5. Los procesos de la compañía y, en especial, los de Capital Humano
  6. La compensación (directa y en forma de beneficios)

Ahora bien, ¿qué pasa cuando una crisis no nos permite atender adecuadamente una o más de estas bases o factores para construir el compromiso emocional de nuestros equipos?

Esto será el tema de una próxima entrega... Te espero...

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